Autotrasplante de ganglios linfáticos, la nueva esperanza

Por Administrador SESPM
¿Es posible el autotrasplante de los ganglios linfáticos? La respuesta es sí y uno de los mayores exponentes españoles en la materia habla sobre ello en el XVI Congreso Mundial de Senología que está teniendo lugar en Valencia, el doctor Jaume Masià. El director del Servicio de Cirugía Plástica del Hospital De la Santa Creu i Sant Pau y del Hospital del Mar de Barcelona explica que en el tratamiento del linfedema, que es otra secuela importantísima del cáncer de mama, la técnica que están aplicando es la reimplantación de ganglios vascularizados. «Lo que estamos haciendo es la restitución anatómica total. Traemos ganglios de otra parte del cuerpo que, digamos, son prescindibles y no van a ocasionar ningún tipo de secuela, y los trasladamos a la axila vascularizados, que tienen una autonomía en cuanto a funcionamiento propio», explica el experto. Esto junto a un proceso de linfogénesis -creación de ganglios linfáticos del cuerpo- ayuda a disminuir el efecto del linfedema y vuelven a transportar la linfa a su lugar.

Se trata de un gran avance en cirugía de cáncer de mama. «De las secuelas del tratamiento del cáncer de mama, que es la pérdida del pecho, las asimetrías por la cirugía conservadora, si controlamos y conocemos y estamos formados en las diferentes técnicas reconstructivas, podemos paliar esa secuela casi al 100%. Lo que no podíamos solucionar y era un gran caballo de batalla imprescindible era el linfedema, que afecta entre un 15 y un 30% de las pacientes sometidas a un tratamiento de cáncer de mama, eso quiere decir miles de mujeres en un país como España al cabo del año. Con esto abrimos una nueva ventana de esperanza al tratamiento definitivo del linfedema », matiza Masià. El doctor ha sido pionero en España en la técnica DIEP para la reconstrucción mamaria. La técnica consiste en aprovechar el exceso de piel y de grasa que hay en el abdomen, en la zona infraumbilical para en este caso reconstruir la mama ya sea parcial o totalmente.

Es un gran avance por dos motivos: «porque es el tejido más parecido al tejido mamario y a la mama y la piel del abdomen es una piel fina y blanca como la de la mama y la grasa abdominal es la grasa más parecida a la de la mama, por tanto lo que se logra es la reconstrucción más específica e idónea y con la mínima movilidad porque de hecho sólo sacamos piel y grasa, explica. Hay muchas técnicas a las que puede recurrir una mujer que haya sido sometida a una mastectomía, «no quiere decir que las otras técnicas no sean útiles ni mucho menos. Hay que individualizar el tratamiento. Lo que tenemos claro es que en una paciente con un contorno corporal con un exceso cutáneo o de tejido en el abdomen yo indicaría siempre que pudiese la técnica DIEP porque estamos aprovechando un exceso de tejido, que por otra parte a nadie le gusta tener barriguita y ese es el mejor tejido para la reconstrucción mamaria y el resultado es una reconstrucción natural. La paciente puede sentir un pecho de verdad, caliente, con la misma textura que el pecho contralateral y si además tiene un exceso de tejido graso en el abdomen, le vamos a hacer una lipeitomía estética, por lo que perderá dos tallas de pantalón al quitarle ese exceso de tejido abdominal. Siempre hay que recordar que la reconstrucción mamaria es una técnica electiva. La paciente se la hace porque quiere y siempre que sepa bien cuál es el proceso o las limitaciones o todo el procedimiento que va a pasar para llegar a la técnica, sería la técnica de elección», insiste Masià.

Perfil
Jaume Masià Es director del Servicio de Cirugía Plástica del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y del Hospital del Mar de Barcelona y presidente Electo de la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética. También es director de la Unidad de Reconstrucción Mamaria Avanzada y de Microcirugía de la Clínica Planas.

Elisa Vives
Gabinete de Prensa
XIX Congreso SESPM
XVI Congreso Mundial SIS

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